Un estudio de médicos de Wuhan, China,  describe cambios pulmonares patológicos en tomografías computarizadas (CT) de pacientes completamente asintomáticos. Los investigadores encontraron lesiones consistentes con inflamación del tejido pulmonar subyacente, y que se describen como opacidades de vidrio esmerilado y consolidación. Estas lesiones no son específicas de la infección por SARS-CoV-2 y pueden verse en otras formas de enfermedad pulmonar. Lo que sigue siendo un misterio es porqué, a pesar de estos cambios, los pacientes no muestran síntomas típicos de neumonía, como falta de aliento severa. El estudio refuerza que la ausencia de síntomas no implica la ausencia de daño. El artículo original en esta liga: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC7152865/
Alrededor de una cuarta parte de los pacientes en el estudio desarrollaron fiebre, tos y dificultad para respirar, pero muchos no. La respuesta a la infección variable entre individuos es uno de varios acertijos de COVID-19: dos personas con exactamente la misma demografía y salud pueden expresar la enfermedad en los extremos opuestos del espectro, muy graves o sin síntomas.
La falta de síntomas frente a la patología activa conlleva un riesgo tanto para las personas infectadas como para el público. Los consejos a los pacientes a quedarse en casa hace que la presentación tardía al hospital y la muerte sean un riesgo. Hasta el 40-45% de las personas infectadas con SARS-CoV-2 permanecen asintomáticas, con una carga viral tan alta como las que están activamente enfermas. Se complica más cuando hay hasta un 20% de falsos negativos para las pruebas de detección, por las variaciones en la carga viral. Estos asintomáticos pueden dispersar el virus por hasta 14 días.