Un profesor de la Universidad de Michigan y sus colegas expertos en la física del flujo de partículas y gotas, han estudiado los riesgos de COVID-19 en los autobuses que usan los estudiantes universitarios para moverse por el campus.
Todavía no está claro cuál es la dosis mínima del virus para infectarse. Sin embargo, basado en análisis científicos, se ha establecido que el virus se propaga predominantemente a través de aerosoles en el aire. Estos aerosoles, gotitas en el aire, se propongan principalmente al toser, estornudar, cantar o incluso simplemente hablar. Las gotas grandes, para ser exactos, tan anchas como un cabello humano, tienden a caer dentro de unos 30-60 cm y depositarse en las superficies cercanas. Sin embargo, las gotas más pequeñas pueden permanecer suspendidas durante horas y transportar el virus, especialmente en sitios cerrados como los autobuses. Las corrientes de aire generadas por la calefacción, la ventilación y el aire acondicionado son capaces de esparcir estos aerosoles, de una persona infectada a otros pasajeros. Las ventanas abiertas traen aire fresco y diluyen la concentración general, lo que reduce en gran medida el riesgo de un brote. Las recomendaciones son:
1.Usar cubrebocas
La mejor manera de prevenir la propagación de COVID-19 es asegurarse de que todos lo usen. Los cubrebocas no solo minimizan la cantidad de gotas que escapan, sino que también ralentizan las gotas que no se detienen y reducen la distancia que pueden viajar, todo lo cual es crucial en espacios reducidos. No todas las máscaras son igualmente efectivas y ninguna máscara funciona si el usuario no se tapa la boca y la nariz en todo momento. Por eso, lo ideal sería prohibir el consumo de alimentos y bebidas a bordo de los autobuses.
2.Hacer trayectos cortos
Lo ideal es que los viajes en autobús no demoren más de 15 minutos para minimizar el riesgo de que una persona infectada propague el virus. Desafortunadamente, eso no es posible en todas las rutas.
3. Dejar asientos vacíos
Reducir el número de pasajeros en los autobuses hace que el distanciamiento social sea más viable y disminuye la probabilidad de que una persona infectada se encuentre en el autobús. Si puedes ir caminando o en bicicleta, ¡te animamos a hacerlo! Es mucho más seguro.
4. Mantener las ventanas abiertas
Dejar las ventanas y las trampillas del techo abiertas ayuda a que entre aire fresco, lo que reduce la concentración de aerosoles en el autobús y aumenta el tiempo que los pasajeros y el conductor pueden estar a bordo. Si el clima es malo recuerda abrigarte para no coger frío.
5. Usar purificadores de aire especializados cuando las ventanas estén cerradas
Estos dispositivos, podrían ayudar potencialmente a reducir la transmisión del virus. Algunos fabricantes ya están modernizando los autobuses con sistemas de filtración de aire de grado médico.
6. No uses aire acondicionado o calefacción cuando las ventanas del autobús estén cerradas
Si las ventanas están cerradas, el uso de aire acondicionado o calefacción automotriz puede hacer que todos a bordo corran un mayor riesgo de infección. Sin embargo, cuando las ventanas están abiertas, los sistemas de calefacción y aire acondicionado pueden ayudar a traer aire fresco y eliminar las gotas que transportan el contagio.
7. Protección para los conductores de autobuses
Los conductores requieren equipo de protección personal especializado. Lo mejor es que usen mascarillas N95 de alta filtración. Así mismo, los conductores deberían hacerse pruebas regularmente para identificar si están infectados. Las barreras de plexiglás entre el conductor del autobús y la puerta, ayudarían a mantener el distanciamiento social y minimizarían la exposición.
8. Mantener una buena higiene
Revisión de temperatura, tener a bordo un suministro de máscaras de repuesto , dispensadores de desinfectante para manos y pequeños botes de basura sin contacto, pueden ayudar a reducir el riesgo. Los autobuses deben ser desinfectados y ventilados a diario.
Si tienes síntomas es mejor quedarse en casa y reducir la exposición si es posible.