La expresión "inmunidad colectiva" es engañosa. Deberíamos hablar de una manera más flexible, por ejemplo: “inmunidad de grupo” o “inmunidad aumentada”. La guerra frente a la pandemia causada por el COVID-19 debe no solo librarse a nivel “centralizado”, pero en modelo “guerra de guerrillas” avanzando hacia la inmunización de sectores o grupos.
El concepto de inmunidad de rebaño se refiera a qué medida que aumenta la tasa de inmunidad entre una población, las tasas de transmisión disminuyen y, más allá de un umbral, conducen hacia una reducción de la circulación del virus y, en el mejor de los casos, desaparición (al menos temporal) del mismo. Pero, para llegar a la inmunidad colectiva, hay dos maneras:
- Inmunizando a la gente por medio de la vacunación
- Hacer que una gran parte de la población padezca la enfermedad
En el primer caso, se está haciendo un gran esfuerzo para llegar a obtener la vacuna, pero todavía toca esperar. En el segundo caso, se ocultan aspectos importantes de problema, entre ellos que la enfermedad afecta de manera diferente a cada personas y que la enfermedad se ve afectada por los cambios de comportamiento.
Si planteamos este problema desde un punto de vista de "veterinaria", una manada se define como:
Una cantidad de animales mantenidos, alimentándose o viajando juntos; condujo; rebaño: una manada de ganado; un rebaño de ovejas; Una manada de cebras. Si uno piensa en una manada de ganado, no piensa en separaciones dentro de la población. ¡"Rebaño" connota que no existe tal separación! Todo el ganado se reúne.
Sin embargo, una táctica clave para luchar contra COVID-19 es mantener a los vulnerables, personas mayores o con patologías previas, separados del resto de la población. No debemos pensar en la población como un rebaño porque no lo somos. Incluso, si inmunizáramos a la población “de bajo riesgo”, creando una inmunidad colectiva, un trabajador del personal infectado con COVID-19, podría, por ejemplo, ingresar a un hogar de ancianos y matar a docenas de personas. Además, que la variabilidad individual, junto con los cuadros complejos que presentan muchas personas infectadas, hacen que infectarse sea un riesgo en sí mismo.