David Dowdy y Gypsyamber D´Souza epidemiólogos de la Universidad de Medicina Johns Hopkins hacen la siguiente reflexión sobre la “inmunidad de rebaño”:
Hemos escuchado con preocupación las voces de quienes sugieren erróneamente que la inmunidad del rebaño puede "retrasar la propagación" de la enfermedad COVID-19. Como epidemiólogos de enfermedades infecciosas, deseamos establecer claramente que la inmunidad colectiva contra COVID-19 no se logrará a nivel de población en 2020, salvo a costa de tener una catástrofe de salud pública.

Aunque se han notificado más de 2.5 millones de casos confirmados de COVID-19 en todo el mundo, los estudios sugieren que (a principios de abril de 2020) no más del 2-4% 3-5 de la población del mundo ha estado infectada con SARS-CoV-2 (el coronavirus que causa COVID-19). Incluso en los puntos críticos como la ciudad de Nueva York, que se encuentra entre los sitios más afectados por la pandemia, los estudios iniciales sugieren que quizás hasta el 15-21% de las personas han estado expuestas hasta ahora. Al llegar a ese nivel de exposición, más de 17,500 de los 8.4 millones de personas en la ciudad de Nueva York (aproximadamente 1 de cada 500 neoyorquinos) han muerto, y los datos sugieren que la tasa de mortalidad puede aumentar. Algunos han considerado la idea de una "infección voluntaria controlada”, similar a las "fiestas de la varicela" de los años ochenta. Sin embargo, COVID-19 es 100 veces más letal que la varicela. Por ejemplo, en el crucero Diamond Princess en el cual muchos de los participantes se infectaron por COVID-19, la tasa de mortalidad entre las personas infectadas con SARS-CoV-2 fue del 1%. Participar en esas fiestas, no es solo una gran tontería, sino que aumenta las probabilidades de morir de los participantes. Además, ponen en riesgo a sus familiares ya amigos.
Para alcanzar la inmunidad del rebaño para COVID-19, probablemente el 70% o más de la población necesitaría ser inmune. Según el ritmo actual de la pandemia, millones de personas tendrían que morir. Es importante recordar que somos vulnerables. Hay que aumentar las cantidades de pruebas frente al corona virus, conocer el alcance real de la infección y no olvidar que esta infección sólo acaba de empezar.