
"Journal of Adolescent Healt" publicó el pasado lunes una investigación en la que indicaba que uno de cada tres adultos jóvenes está en riesgo de sufrir COVID-19 grave, y fumar desempeña un papel importante en ese riesgo. Un grupo de investigadores de la Universidad de California, San Francisco, Estados Unidos, estudiaron a más de 8,000 participantes de entre 18 y 25 años que habían participado en la Encuesta de Salud en estados unidos para observar si había relación entre ser vulnerables al coronavirus y una serie de indicadores de riesgos preestablecidos. Entre esos indicadores, se encontraba el hábito de fumar y el estado de salud. Las observaciones indican que el 32% de la población joven de Estados Unidos es vulnerable a padecer COVID-19 en su forma aguda. Sin embargo, al eliminar el porcentaje de fumadores tanto de cigarrillos, como de cigarrillos electrónicos, el porcentaje caía al 16%. Este estudio también observó que, dentro del total de la población, los hombres adultos jóvenes tienen mayor riesgo. Aunque un mayor número de mujeres informaron tener asma y otras afecciones inmunitarias, las tasas más altas de tabaquismo en los hombres anulan esto. Sin embargo, estudiando sólo a los no fumadores, las mujeres tendrían un mayor riesgo de padecer un COVID-19 agudo. Además, los resultados mostraron un riesgo más bajo en minorías étnicas y raciales en comparación con el subgrupo de personas blancas en este rango de edad. Este resultado, no concuerda con los datos de morbilidad y mortalidad observados en minorías étnicas o raciales en los cuales se ha demostrado unas tasas mucho más altas en estos grupos minoritarios. Esto sugiere que otros factores no relacionados con la vulnerabilidad médica pueden estar asociados al riesgo de padecer la enfermedad. Hay que reconocer la limitación de este tipo de estudios debido a la fuente de los datos recopilados.
Fuente
7/13/2020